La adopción internacional es una moda. La adopción internacional es una sangría humana para los países pobres. La adopción internacional sólo sirve para satisfacer frustraciones de parejas ricas y de mujeres que no han querido parir. La adopción internacional es una nueva modalidad del tráfico de personas. La adopción internacional es el más repugnante de los negocios ilegales. La adopción internacional es una frivolidad de las sociedades desarrolladas.
En el debate sobre la adopción no es raro escuchar sentencias de este calibre. ¿Son falsedades malintencionadas? ¿Son verdades como puños? Es casi seguro que de todo hay. Que hay fraudes y que hay frivolidades. Pero nos vamos a permitir emitir una sentencia también categórica: en la inmensa mayoría de los casos lo que hay es la convergencia de dos anhelos, el de ser padres y el de tener unos padres. La frase, seguramente reproducida con inexactitud, no es original, la hemos leído en algún sitio, pero la hacemos nuestra.
El escándalo de Madonna en Malawi, el revuelo en torno al viaje de Angelina Jolie a Vietnam, su supuesta declaración de que buscaba un nuevo hijo para superar la depresión que le causó la muerte de su madre y la publicación de las fotos de los hijos de los famosos en los orfanatos, además de violar el derecho a la intimidad y la protección de la imagen de los menores, contribuye a trivializar la adopción internacional. ¿Por su culpa? Quizás con la ayuda imprescindible de la prensa, de la caníbal y de la otra, pero convendría que no quedase la sospecha (y casi siempre queda) de que con fama y dinero también adoptar un hijo es más fácil.
En el debate sobre la adopción no es raro escuchar sentencias de este calibre. ¿Son falsedades malintencionadas? ¿Son verdades como puños? Es casi seguro que de todo hay. Que hay fraudes y que hay frivolidades. Pero nos vamos a permitir emitir una sentencia también categórica: en la inmensa mayoría de los casos lo que hay es la convergencia de dos anhelos, el de ser padres y el de tener unos padres. La frase, seguramente reproducida con inexactitud, no es original, la hemos leído en algún sitio, pero la hacemos nuestra.
El escándalo de Madonna en Malawi, el revuelo en torno al viaje de Angelina Jolie a Vietnam, su supuesta declaración de que buscaba un nuevo hijo para superar la depresión que le causó la muerte de su madre y la publicación de las fotos de los hijos de los famosos en los orfanatos, además de violar el derecho a la intimidad y la protección de la imagen de los menores, contribuye a trivializar la adopción internacional. ¿Por su culpa? Quizás con la ayuda imprescindible de la prensa, de la caníbal y de la otra, pero convendría que no quedase la sospecha (y casi siempre queda) de que con fama y dinero también adoptar un hijo es más fácil.
1 comentario:
El problema de la prensa rosa es que todo lo trivializa: adopciones, malos tratos, muertos a los que se le sigue sacando trapos sucios...y desgraciadamente todo lo que se dice en la tele se da como cierto. En el caso de las adopciones, hay que recordar que EEUU no cumple el convenio de la Haya y desgraciadamente sus leyes le permiten elegir a los niños a dedo. Y eso que son la primera potencia mundial!!!! Aun recuerdo cuando se hablaba de la Thissen y su adopción, pero no se hizo mucho hincapié en que fue posible porque tiene la ciudadanía estadounidense, porque en España sería imposible, ni con dinero.
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